¿LA FUERZA PÚBLICA PUEDE LLEGAR AL PATOTERISMO?
En una Provincia donde los índices de delincuencia son elevados y los accidentes de tránsito abundan por la imprudencia de los conductores, los operativos viales son necesarios. Pero jugar con un cargo asignado por la Provincia y abusar de la autoridad es un uso abusivo, que desde la democracia, todos los periodistas debemos repudiar. Cuando uno se equivoca debe afrontar su culpa como cualquier ciudadano y tratar, ya lo decían los grandes sociólogos, a través de sanciones o premios, encaminarse en una sociedad. Paso a contar mi historia porque me da mucha pena que cientos de miembros de las fuerzas de seguridad traten de acercarse a su pueblo y lo demuestran con las agrupaciones de mini policías y otras actividades, pero uno de ellos puede manchar ese trabajo digno y lo convierte en un daño psicológico irreparable. A este material le adjunto pruebas fotográficas y dejo mi nombre y apellido como muestra de mi malestar porque viviendo en épocas de democracia, algunos ADN todavía no se modifican y pretenden instaurar a través del miedo la desidia y lo más bajo de una sociedad patoteril. La educación informal y las relaciones públicas y humanas también deberían formar parte de la formación de cualquier policía, y si es que tienen estas materias pediría a sus profesores que revean los planes de estudio.
El viernes 13 de noviembre a las 18 horas me dirigía por Ruta 50 de San Martín con destino al distrito de Ingeniero Giagnoni, Junín, para realizar una nota periodística para el medio donde trabajo. Me acompañaba mi hijo de cinco años atrás con su cinturón colocado. Cómo siempre me aseguro de llevar todos los papeles en regla, cinturones porque uno se educa y ya se hace parte del manejo estos detalles. Como data en el acta de infracción labrada, en las intersecciones de calle Ruta 50 y el Alto, un policía me detiene y me pide que me coloque a la vera del camino, cosa que hago sin objeciones. Cuando me se acerca me pide carnet y tarjeta, cosa a la que accedo sin objeciones para no entorpecer su trabajo. Me avisa que me iba a labrar una multa leve porque tenía las luces apagadas del vehículo, cosa que no era así y me llamó la atención.
Cuando me bajo del automóvil, se escucha la alarma del vehículo que al tener las luces prendidas y las puertas abiertas la alarma acciona su avisador. Le comenté esto al agente y me dijo que era la palabra mía contra la de él. Como no quería problemas no le expliqué que cuando uno saca el contacto, todo el sistema eléctrico se detiene. Entonces le dije que procediera que me labrara el acta. A todo esto mi hijo Bruno desde atrás veía lo sucedido y se largó a llorar, cosa que me hizo apurar más aún. Bueno, seguí mi viaje a Giagnoni donde saqué fotografías y me sacaba la bronca porque nadie iba a entender ni me iba a creer que desconocía una potencial falla mecánica.
Decido volver a casa y obligádamente tengo que pasar nuevamente por el operativo. Entonces observo un cuadro que me llamó la atención. El policía que me labraba la infracción hacía vista gorda a quienes circulaban con luces apagadas. Entonces decido bajarme y fotografiar el suceso. Con mi cámara tomo una foto que es la que adjunto donde pueden observar que el patrullero me señala en tono amenazante y charla con dos amigos a quienes no le labró el acta y también tenían las luces sin encender. Pero lo curioso cuando llego a casa y veo la foto es que de fondo se puede observar una señora manejando un ciclomotor con un niño adelante y sin casco por plena ruta. Pero el agente seguía concentrado en mí. Cuando tomo algunas fotos decido seguir con mi viaje.
Unos trescientos metros de operativo se acerca el agente en moto y me hace a un lado de la ruta y me dice "que te pasa gordito, querés acompañarnos hasta que se termine el operativo. Vos obstruir nuestro trabajo sacando fotos. ¿De qué medio venís?. Entonces le presenté mi credencial y le decía que aprovechaba las imágenes para escribir un artículo sobre el operativo. Él me contesta "mirá que se pueden ampliar cosas en el acta de infracción. A parte le voy a agregar que estas sacando fotos al trabajo de la policía". Esa fue la gota que rebalsó el vaso, mi hijo vuelve a lagrimear y decirle al agente "señor no nos haga nada".
En una Provincia donde los índices de delincuencia son elevados y los accidentes de tránsito abundan por la imprudencia de los conductores, los operativos viales son necesarios. Pero jugar con un cargo asignado por la Provincia y abusar de la autoridad es un uso abusivo, que desde la democracia, todos los periodistas debemos repudiar. Cuando uno se equivoca debe afrontar su culpa como cualquier ciudadano y tratar, ya lo decían los grandes sociólogos, a través de sanciones o premios, encaminarse en una sociedad. Paso a contar mi historia porque me da mucha pena que cientos de miembros de las fuerzas de seguridad traten de acercarse a su pueblo y lo demuestran con las agrupaciones de mini policías y otras actividades, pero uno de ellos puede manchar ese trabajo digno y lo convierte en un daño psicológico irreparable. A este material le adjunto pruebas fotográficas y dejo mi nombre y apellido como muestra de mi malestar porque viviendo en épocas de democracia, algunos ADN todavía no se modifican y pretenden instaurar a través del miedo la desidia y lo más bajo de una sociedad patoteril. La educación informal y las relaciones públicas y humanas también deberían formar parte de la formación de cualquier policía, y si es que tienen estas materias pediría a sus profesores que revean los planes de estudio.El viernes 13 de noviembre a las 18 horas me dirigía por Ruta 50 de San Martín con destino al distrito de Ingeniero Giagnoni, Junín, para realizar una nota periodística para el medio donde trabajo. Me acompañaba mi hijo de cinco años atrás con su cinturón colocado. Cómo siempre me aseguro de llevar todos los papeles en regla, cinturones porque uno se educa y ya se hace parte del manejo estos detalles. Como data en el acta de infracción labrada, en las intersecciones de calle Ruta 50 y el Alto, un policía me detiene y me pide que me coloque a la vera del camino, cosa que hago sin objeciones. Cuando me se acerca me pide carnet y tarjeta, cosa a la que accedo sin objeciones para no entorpecer su trabajo. Me avisa que me iba a labrar una multa leve porque tenía las luces apagadas del vehículo, cosa que no era así y me llamó la atención.
Cuando me bajo del automóvil, se escucha la alarma del vehículo que al tener las luces prendidas y las puertas abiertas la alarma acciona su avisador. Le comenté esto al agente y me dijo que era la palabra mía contra la de él. Como no quería problemas no le expliqué que cuando uno saca el contacto, todo el sistema eléctrico se detiene. Entonces le dije que procediera que me labrara el acta. A todo esto mi hijo Bruno desde atrás veía lo sucedido y se largó a llorar, cosa que me hizo apurar más aún. Bueno, seguí mi viaje a Giagnoni donde saqué fotografías y me sacaba la bronca porque nadie iba a entender ni me iba a creer que desconocía una potencial falla mecánica.
Decido volver a casa y obligádamente tengo que pasar nuevamente por el operativo. Entonces observo un cuadro que me llamó la atención. El policía que me labraba la infracción hacía vista gorda a quienes circulaban con luces apagadas. Entonces decido bajarme y fotografiar el suceso. Con mi cámara tomo una foto que es la que adjunto donde pueden observar que el patrullero me señala en tono amenazante y charla con dos amigos a quienes no le labró el acta y también tenían las luces sin encender. Pero lo curioso cuando llego a casa y veo la foto es que de fondo se puede observar una señora manejando un ciclomotor con un niño adelante y sin casco por plena ruta. Pero el agente seguía concentrado en mí. Cuando tomo algunas fotos decido seguir con mi viaje.
Unos trescientos metros de operativo se acerca el agente en moto y me hace a un lado de la ruta y me dice "que te pasa gordito, querés acompañarnos hasta que se termine el operativo. Vos obstruir nuestro trabajo sacando fotos. ¿De qué medio venís?. Entonces le presenté mi credencial y le decía que aprovechaba las imágenes para escribir un artículo sobre el operativo. Él me contesta "mirá que se pueden ampliar cosas en el acta de infracción. A parte le voy a agregar que estas sacando fotos al trabajo de la policía". Esa fue la gota que rebalsó el vaso, mi hijo vuelve a lagrimear y decirle al agente "señor no nos haga nada".
Eso me llegó muy profundo al corazón, desde allí decidí hacer un montón de cosas pero sólo atiné a contestar "Yo sólo estoy trabajando y usted me está patoteando". El agente agarró su moto y volvió a su actividad después de amenazarme y provocar el miedo en el niño. Eso me hizo recordar algunas historias de mi padre cuando el gobierno estaba manejado por la fuerza pública. Me sentí un desnudo legal.Por eso apelo a los medios para que estas situaciones no se repitan y que de una vez por todas la policía deje de tener en sus filas este tipo de amenazadores, patoteros, ignorantes de las leyes y la libertad de expresión, arrogantes, irrespetuosos y con complejo de poder, sin pensar que ese poder es heredado por el Gobierno (nosotros) y que su subsistir depende de quienes pagamos los impuestos, incluso esas multas, que como repito no tengo problema en pagar porque fue una falta, a pesar que no fue intencional.
A. SAN MARTÍN SOLO EN LA PUNTA
En el día de ayer en la cancha del chacarero, el local derrotó al boli de Argentino por 1 a 0, en un partido no apta para cardíaco.En n partido electrificante, el chacarero comenzó el partido con toda las ganas, pero se llevó la gran sorpresa por parte de los jugadores del "BOLI", ya que los visitantes mantuvieron un planteo impecable y casi perfecto, ya que lo complicó al local. El chacarero tuvo en el pimer tiempo varias oportunidades de gol y hasta un gol anulado.
Ya en el segundo tiempo, San Martín salió con las misma base y planteo, mientras que Argentino ingresó al campo de juego con las mismas expectativas. El tiempo transcurría y San Martín no econtraba el rumbo. Pero un pie salvador de parte de Juares, y "justo a tiempo" a los 48 minutos del segundo tiempo puso el 1 a 0 y se desató el delirio de la gente .
Premiados
La comición directiva del a. San Martín se complace en distinguir a yesica marcos, Campeona invicta Argentina Super Gallo y a Fernando Alcaraz, galardonado como mejor boxeador en el último Festival Guantes de Oro.
Se viene el 2º Torneo Internacional de Hockey sobre Patines
Del miercoles 28/11 al domingo 22/11 se realizará en el estadio cubierto Esteban Constantini, el 2º Toreneo Internacional De Hockey sobre Patin donde participa, entre los destacado Palmira, Banco Hispano de San Juan, San Lorenzo en tre otros. Participaran las categorias de 10 y 11 años y la senior.
La prensaComo siempre bien atendida por los responsable de la Dirección de Prensa y Difución.
Fraces
Marcelo Vázquez -DT de San Martín: "fue un partido trabado, ellos vinieron a hacer su juego y por momentos nos complicó, Hicieron un planteo inteligentes y nosotros la verdad no jugamos bien pero es importantisimo los tres puntos en casa"
Cristian Mortes - Jugador de Argentinos: "Nos vamos tristes porque jugamos bien y este gol al último minuto fue un golpe fuerte, pero nos tenemos que levantar y seguir adelante"
Por Prof. José Luis Agüero(H)
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